Reseña Tú, yo, todo de Catherine Isaac

Tú, yo, todo | Catherine Isaac | Editorial Roca | Comprar

Cansada de que su novio Adam no parara de mentirle, engañarle y que no mostrara ningún tipo de interés en ser padre, Jess le echó de casa apenas unos meses después de haber dado a luz a su hijo William. Ahora su madre Susan le ayuda a cuidarlo, mientras Adam se ha trasladado a Francia persiguiendo sus sueños y liberándose de cualquier compromiso y del niño que nunca quiso.

Diez años después, Susan se encuentra ingresada en un asilo y luchando contra una enfermedad que la está matando a sus 53 años. Allí es donde Susan obliga a su hija Jess a reconocer algo que nunca ha querido admitir: que William necesita un padre en su vida. Así, en su primer viaje al extranjero en años, Jess y William, ahora con diez años, se disponen a pasar el verano en el Castillo de Roussignol, en las ricas y soleadas colinas de la Dordoña. Allí encontrarán a Adam de nuevo, y Jess deberá conseguir que este acepte y empiece a querer a su propio hijo.

Pero lo peor no es que Adam esté lejos de ser un participante voluntario en este juego, si no que Jess vive atormentada por un secreto terrible que nadie, y especialmente William, deberá descubrir nunca

Personajes principales Jess, Adam y William

Prólogo + 83 capítulos

La gran protagonista de esta novela es Jess y a través de ella conoceremos su historia y la enfermedad de Huntington. La cual desconocía que existía

Solo el prólogo me sumergió en mil sentimientos diferentes. Es una novela tan intensa, que te atrapa enseguida. Un estupendo comienzo que no he podido parar de leer hasta el final.

Os pongo en situación pero no voy a revelar nada importante.

El prólogo nos sitúa cuando Jess y Adam son jóvenes. Algo ocurre entre ellos que ocasiona que la relación se termine pero los une para siempre alguien, William, su hijo.

En la historia no solo conoceremos lo que va ocurriendo en el presente y lo que piensa Jess en cada momento. Sino que también a través de sus recuerdos nos hace participes de su pasado.

Así, descubriremos que ocurrió en su historia de amor con Adam. También los baches que sufrió su familia no solo con respecto a la enfermedad, sino a todas las situaciones que se van planteando.

Llega un momento en el que la emoción es tal que me costaba un poco avanzar, se te encoge el alma de una manera increíble.

Los capítulos son cortos y me gusta porque no son nada pesados, las páginas fluían sin querer. 

Las descripciones que hace la autora son ligeras. Sabe incluirlas muy bien en la historia.

Es un libro que he disfrutado muchísimo, aparte de bonito, sencillo y desgarrador, me ha parecido muy interesante conocer esta enfermedad. No he parado de emocionarme y es que es muy dura la situación que atraviesan.

Tú, yo, todo es una novela realmente increíble y emotiva. Una gran apuesta de la editorial que ha dado en el clavo.

La historia es preciosa aunque muy desgarradora. La vida no es fácil y en esta novela se demuestra a través de la enfermedad de Huntington. Pero la lucha constante de los personajes es una muestra de lo que la vida merece la pena. Vive el presente, sin miedo y a tope. Ese y muchos mensajes más me han sido transmitidos con Jess.